Consejo Regional de Conservación de Suelos | Mitos y paradojas en torno a la conservación de los suelos
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Mitos y paradojas en torno a la conservación de los suelos

En ocasiones, las lluvias intensas en la zona rural generan problemas de erosión en los suelos, inundaciones y anegamientos. Sin embargo, existen alternativas para hacer frente a estas problemáticas hídricas, conservar el suelo y mejorar la producción. Una de ellas es la sistematización predial. Pero, ¿de qué se trata?

“Cuando se habla de sistematización predial estamos hablando de excedentes hídricos. Apunta a sistematizar el movimiento, a disminuir la cantidad de escurrimientos. Y en caso de que haya un excedente extra predial conducirlo de manera ordenada con la intención de que eso no erosione la superficie productiva del campo o de campos vecinos”, explica el Ing. Agr. Marcos Barbora, asesor técnico e integrante del CRCS Río Cuarto.
Las obras que se asocian a la sistematización son la construcción de terrazas, es decir, bordos hechos con suelo extraído del mismo lote que buscan interrumpir el escurrimiento del agua pendiente abajo para estancarlo, retenerlo y, en caso de excedentes de mayores caudales o de que el diseño así lo requiera, conducirlos hasta un punto de salida por medio de un canal empastado (o una vía de escurrimiento consolidada).

Las obras que se asocian a la sistematización son la construcción de terrazas, es decir, bordos hechos con suelo extraído del mismo lote que buscan interrumpir el escurrimiento del agua…

Respuestas a la implementación de dichas obras

“Las consideraciones o las contras las ve el mismo productor. Hoy el desafío es demostrar que esas contras no son tales y diluirlas. Si el productor piensa que la construcción de terrazas es una complicación operativa, el esfuerzo técnico está enfocado precisamente en que la terraza no afecte negativamente la operatividad de las labores dentro del campo”, explica Barbora.

Fomentando estas prácticas: «Las ganas son todo»

Para el Ing. Barbora todavía hay una resistencia a la sistematización predial, por desconocimiento. Por eso considera importante las convocatorias a productores rurales para demostraciones reales, “para que pisen, vean los beneficios, sientan la obra. Y sería bueno reunirnos en dos años para ver cómo está funcionando el sistema una vez estabilizado. Las ganas son todo. Es la diferencia entre el quiero y puedo.  Tener ganas de solucionar un problema o prevenirlo es fundamental. Nadie logra resultados sin pasar a la acción y para eso hacen falta las ganas y tomar la decisión”.

«Las ganas son todo. Es la diferencia entre el quiero y puedo. Tener ganas de solucionar un problema o prevenirlo es fundamental. Nadie logra resultados sin pasar a la acción«

Derribar un mito

Existe la creencia de que, si el vecino no hace nada en el ordenamiento de sus escurrimientos, impide a nosotros desarrollar un proyecto de control de sistematización. “Eso es un mito, una creencia, una resistencia que sirve para fundamentar una concepción errónea de buscarle la solución”, dice el Ing. Barbora. Y agrega: “el desafío para el técnico que actúa en ese campo que recibe aguas del vecino va a ser gestionar el agua que ingresa, conducirla de manera ordenada y a la vez adaptar el proyecto del campo a esa condición, buscando que el agua propia del campo se minimice y el agua que entra desde arriba circule por el campo sin romper el suelo”.

Existe la creencia de que, si el vecino no hace nada en el ordenamiento de sus escurrimientos, nos impide a nosotros desarrollar un proyecto de control de sistematización. «Eso es un mito»

Paradojas de la tecnología

Por su parte, el Ing. José Manuel Cisneros, docente de la UNRC, también integrante del CRCS Río Cuarto, explica que “los suelos son cuerpos naturales, dinámicos, que en la medida en que los exigimos se estresan, como cualquier cuerpo, hasta el punto en que pueden llegar a destruirse. En campos que no se manejan adecuadamente, las lluvias exceden la capacidad de infiltración, empiezan a escurrir y ese escurrimiento va a parar al vecino o al camino. Entonces nos encontramos en la paradoja de campos con tecnología muy moderna y muy cara, y caminos que son verdaderos ríos”.  Es en esas paradojas donde se asienta el CRCS para organizar solidariamente a los productores en Consorcios de Conservación de Suelos, intensa tarea en conjunto con la provincia, sobre todo en difusión, “porque si el productor no conoce no lo va a implementar”.

Nos encontramos en la paradoja de campos con tecnología muy moderna y muy cara, y caminos que son verdaderos ríos»

La conservación de suelos como proceso

Conservar los suelos no es solamente construir terrazas. “La conservación de suelos es más amplia, abarca muchas ramas de la agronomía como profesión. Pasa por cuidar la fertilidad del suelo, restaurarla; monitorear y mejorar la condición física de los suelos para que estén trabajando al máximo de su potencial”, sostiene Marcos Barbora. Y agrega que las terrazas se construyen con el objetivo de que tengan una perdurabilidad en el tiempo. “Eso no quita que haya que hacer un seguimiento anual después de cada campaña, donde se puedan identificar puntos de potencial fragilidad para reforzarlos y así, en un lapso de dos, tres o cuatro años como máximo, el sistema esté estabilizado y afianzado”.